¿Cómo sé por dónde empezar? ¿Cuál son mis debilidades? ¿Qué mejoro? ¿Cuál es la mejor forma de rendir más?¿Valoración?
Todas estas preguntas y más, son las que nos asaltan a la cabeza cuando queremos empezar a entrenar. Si desconozco mi estado físico actual, no puedo planificar ni programar con exactitud mi entrenamiento.
Esto desembocará en un futuro, en estancar tu evolución o aumentar tu riesgo de lesión por no abordar los posibles problemas y descompensaciones.
Por este motivo, es muy importante realizar una valoración, acorde con el deporte del cual nos estemos preparando. Allí veremos cómo nos encontramos y nos podremos comparar con registros de otros deportistas para observar y poder diseñar, hacia donde tiene que ir nuestro entrenamiento.
Existen test diseñados para deportes concretos o pruebas más funcionales para testear aspectos más generales. En ellos podríamos observar: Composición corporal, capacidad aeróbica (V02max, anaeróbico…), valoración de fuerza (FMax, Fpotencia…), velocidad, flexibilidad o amplitud de movimiento (AMD) entre otros…

Así que, primero, deberíais detectar cuáles son los que más os pueden ayudar en vuestros objetivos, efectuarlos y marcaros futuros recordatorios para ver vuestro progreso.
¿Qué beneficios me puede aportar valorar?
En primer lugar, como hemos comentado anteriormente, ayuda en la planificación del deportista y se puede observar en que nivel se encuentra, tanto a nivel personal como en comparación con otros deportistas en su mismo contexto.
Se puede observar si existen déficit de fuerza u otras capacidades, esto, ayudará a reducir el riesgo de lesión por lo que tu rendimiento puede mejorar, más disponibilidad, más minutos…
Algunos test específicos pueden detectar anomalías físicas y descompensaciones de nuestros deportistas, esto nos ayudará en el momento de diseñar nuestro trabajo hacía su corrección y/o mejora.
Depende del deporte selecciona tu batería de controles que crees que te van a aportar la mayor información para que la planificación de tus deportistas sea la más eficiente.
Por último y no menos importante, mostrarle al deportista sus propios resultados, ver su evolución y compararlo con otros deportistas, puede ser una herramienta de motivación. Tanto sí su evolución es positiva, verá que puede lograr los objetivos establecidos, como si sus resultados son negativos, tendremos una baza para que modifique sus hábitos e incidir más en su preparación (si no la tenía en cuenta).

En conclusión, la valoración es una herramienta que deberíamos usar en todos los contextos, tanto deportivos como saludables. Estos test nos ayudarán en nuestro camino hacia los objetivos establecidos, evitaremos ir dando palos de ciego y desviarnos del camino.